Por último, las fachadas en panel fenólico son resistentes y contienen un bajo mantenimiento, tal que, la humedad y el calor no lo dañaran tan fácilmente; así como los revestimientos metálicos que se instalan con paneles de zinc o láminas onduladas. En cualquier caso, la piel de un edificio es de suma importancia, por lo que, el material con el que se cubra la fachada debe ser estudiado y tomado muy en cuenta para la realización de cálculos matemáticos sostenibles a corto y largo plazo, además de la función estética de cada cimentación.