Alonso de Covarrubias

Alonso de Covarrubias: Biografía, ruta y obras

Alonso de Covarrubias Nació en Torrijos Toledo, en 1488, y murió el 11 de mayo de 1570 en Toledo.

Perteneciente a la escuela de Toledo, fue uno de los arquitectos más brillantes del Renacimiento español, con influencias de Diego de Siloe y Rodrigo Gil de Hontañón.

Una evolución acorde con lo sufrido por la arquitectura española durante estos años y su dilatada vida permite apreciar un cambio de estilos en su obra.

Estudió en su ciudad natal de Torrijos como artesano realizado a la sombra de Antón Egas. Sus primeras obras se enmarcan dentro de la estética gótica, desarrollando un fuerte imaginativo en la exuberante ornamentación.

Alonso de Covarrubias

Alonso de Covarrubias y el Hospital de Santa Cruz

En la Catedral de Toledo se realiza la Capilla de la Trinidad de claro y sobrio lenguaje plateresco. En la misma Catedral en 1521, se realiza el sepulcro de Fernando de Castilla, en la capilla de San Eugenio.

Una de las obras más bellas del plateresco español llega con la nueva Capilla de los Reyes de la Catedral de Toledo, 1531-1534. Es el vestigio de la sacristía mayor de la Catedral de Sigüenza, obra de una gran opulencia plástica cuya construcción fue de 1532 a 1534.

En el año 1534 fue nombrado maestro de la Catedral y Diócesis de Toledo. Bajo este cargo se desempeña la iglesia parroquial de Yepes, donde se traza una estructura de estilo gótico tardío pero con importantes elementos renacentistas

En 1534 trabaja en el convento de San Clemente, donde se dan las huellas del nuevo presbiterio y la fachada de la Iglesia.

En la cabecera de la Iglesia se ofrece una solución para la portada de aspecto gótico, sin embargo, en la fachada se realiza una estructura y ornamentación perfectamente clásicas.

En 1540, en lo alto de la Puerta de los Leones de la Catedral de Toledo, Alonso de Covarrubias actúa con gran énfasis decorativo.

En estas mismas fechas, Covarrubias realizó la restauración del Hospital de la Santa Cruz de Toledo, obra que afecta únicamente al tiro con arco. En los mismos años, deja huellas del Palacio Arzobispal de Alcalá de Henares.

En 1537 Covarrubias asume junto a Luis Vega la dirección de las obras de los Reales Alcázares, produciendo un cambio importante en su estilo

En 1541 se encarga de la obra más emblemática en el Hospital Tavera o San Juan Bautista de Toledo. Junto a Luis Vega, conduce las huellas hasta el Alcázar de Toledo, principal responsable de su construcción desde 1543, dejando su huella en el noble patio rectangular, hoy reconstruido.

En 1542, por encargo de la Condesa de Melito, proyectó en Pastrana un importante conjunto palaciego compuesto por un Palacio, una cruz cuadrada, encerrada en un muro y una puerta de entrada de gran desarrollo.

El conjunto de Pastrana no se pudo realizar en su totalidad, aunque sí en sus partes más importantes: el Palacio y la plaza.

En el año de 1548 asumió el trabajo de la cabecera de la Iglesia de la Magdalena de Getafe y proyectó la Iglesia de Santa Catalina en Talavera de la Reina.

Entre sus últimos trabajos, realizados en Toledo, destaca la remodelación de la Iglesia de San Clemente el Real, la construcción de la puerta de la presentación en la Catedral y la Galería Baja del Alcázar.

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La sacristía mayor de la Catedral de Sigüenza de Alonso de Covarrubias

Es un paso importante en la arquitectura de Alonso de Covarrubias hacia un modelo clásico.

Iniciada en 1532, su estructura se debe al modelo tradicional de planta rectangular, cubierta con bóveda de cañón y dividida en tramos por una serie de arcos, sostenidos por medias columnas, adosados ​​al muro.

La bóveda está decorada íntegramente con cabezas y floretes, inscritos en círculos, solución que recuerda a los frescos de Santa Constanza en Roma, que pudo conocer  Alonso de Covarrubias gracias a los libros de dibujos italianos de Don Diego Hurtado de Mendoza.

El Palacio Arzobispal de Alcalá de Henares 

Edificio desaparecido hoy. Realizado en 1535, se proyecta un patio central, escaleras y jardines, además de completar la fachada.

Este presentaba dos ventanas en los pisos inferiores, y semicircular superior; con un escudo a través de una galería de arcos de medio punto y desarrollo decorativo de temas heráldicos, medallones, antorchas y volutas.

El patio estaba estructurado por dos galerías porticadas de estilo alcarriano, con dinteles sobre almohadillas. El énfasis decorativo lo puso en la escalera, cuya caja está disponible antes de las arcadas del patio, sus molduras están cubiertas por diversos motivos ornamentales. Con paredes acolchadas.

El patio del monasterio de San Bartolomé de Lupiana de Alonso de Covarrubias

Realizado el mismo año que el Palacio Arzobispal. Presenta una doble galería de arcos, los ángulos se resuelven mediante un pilar al que se anexan dos columnas

En tres de sus frentes la galería es doble, aumentando un piso en su lado sur, por la necesidad de adaptarse a la estructura dada del antiguo claustro.

El Palacio de Pastrana

Por encargo de la condesa de Melito, doña Ana de la Cerda, Covarrubias representó en Pastrana uno de sus proyectos más ambiciosos, un gran renacimiento palaciego.

El proyecto consistió en una fortaleza del Palacio, con sus respectivos jardines traseros, una plaza frontal que servía de amplia perspectiva a la fachada del Palacio

Y una muralla monumental que rodeaba el conjunto y en la que se abría una gran puerta representativa.

De este proyecto solo pudo realizar el Palacio. La tipología del Palacio sigue el esquema planteado por Covarrubias en los Reales Alcázares, consistente en una planta cuadrada, con cuatro esquinas de torres y un patio central de doble galería.

El proyecto Covarrubias en Pastrana es el primer gran intento del artista de hacer un amplio conjunto urbano renacentista, representativo y señorial, logrado sólo en parte.

El Alcázar de Madrid y Alonso de Covarrubias

La obra de Alonso de Covarrubias seguía la existencia de un plano anterior en el que se había proyectado una planta rectangular, cuya fachada estaba delimitada por dos torres, con dos patios porticados, separados por un ala central que albergaba una capilla.

Alonso de Covarrubias incorporó la Gran escalera doble en la zona central, solucionando los problemas de enlace entre los diferentes sectores del Palacio.

La escalera es sin duda el capitel de la remodelación del Alcázar, ubicada entre los dos patios, y con la que Alonso de Covarrubias se muestra como un gran inventor de formas.

 

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